miércoles, 29 de junio de 2011

Señor Tú me conoces


Reconocimiento de la insondable sabiduría de Dios.




Señor, tú me sondeas y me conoces, tú sabes si me siento o me levanto; de lejos percibes lo que pienso, te das cuenta si camino o si descanso, y todos mis pasos te son familiares. Antes que la palabra esté en mi lengua, tú, Señor, la conoces plenamente; me rodeas por detrás y por delante y tienes puesta tu mano sobre mí; una ciencia tan admirable me sobrepasa: es tan alta que no puedo alcanzarla.
¿A dónde iré para estar lejos de tu espíritu? ¿A dónde huiré de tu presencia? Si subo al cielo, allí estás tú; si me tiendo en el Abismo, estás presente. Si tomara las alas de la aurora y fuera a habitar en los confines del mar, también allí me llevaría tu mano y me sostendría tu derecha.
Si dijera: “¡Que me cubran las tinieblas y la luz sea como la noche a mi alrededor!”, las tinieblas no serían oscuras para ti y la noche sería clara como el día. Tú creaste mis entrañas, me plasmaste en el seno de mi madre: te doy gracias porque fui formado de manera tan admirable.
¡Qué maravillosas son tus obras! Tú conocías hasta el fondo de mi alma y nada de mi ser se te ocultaba, cuando yo era formado en lo secreto, cuando era tejido en lo profundo de la tierra. Tus ojos ya veían mis acciones, todas ellas estaban en tu Libro; mis días estaban escritos y señalados, antes que uno solo de ellos existiera.
¡Qué difíciles son para mí tus designios! ¡Y qué inmenso, Dios mío, es el conjunto de ellos! Si me pongo a contarlos, son más que la arena; y si terminara de hacerlo, aún entonces seguiría a tu lado.




- Salmo 139 (138), 1-18 -

domingo, 26 de junio de 2011

HIMNO EUCARÍSTICO

Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias. A ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte.

Al juzgar de ti se equivocan la vista, el tacto, el gusto, pero basta con el oído para creer con firmeza; creo todo lo que ha dicho el hijo de Dios, nada es más verdadero que esta palabra de verdad.

En la cruz se escondía sólo la divinidad, pero aquí también se esconde la humanidad; creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.

No veo las llagas como las vio Tomás, pero confieso que eres mi Dios: haz que yo crea más y más en ti, que en ti espere, que te ame.


¡Memorial de la muerte del Señor! pan vivo que das la vida al hombre: concede a mi alma que de ti viva, y que siempre saboree tu dulzura.

Señor Jesús, pelícano bueno: límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos sus crímenes al mundo entero.

Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío: que al mirar tu rostro ya no oculto, sea yo feliz viendo tu gloria. Así sea

Santo Tomás
Texto extraído del libro "Corpus Christi", cuyo autor es José Pedro Manglano Castellary. Editorial Desclée de Brouwer

sábado, 25 de junio de 2011

Una rica receta!

HOLA COMO ESTÁN?

 Hoy hace muuuuuucho frio y por lo tanto está ideal para prender el horno y cocinar algo rico....entonces había pensado cocinar una rica torta marmolada.Se las recomiendo, prueben de hacerla y después a disfrutarla en familia o con amigos.

TORTA MARMOLADA:
manteca----200 grs
azúcar-----400 grs
harina-----500 grs
huevos-------5
leche------300 cc
vainillin----1 cda
cacao--------4 cdas

LA PREPARAMOS:

Colocar la manteca bien blanda y batir con el azúcar muy bien, agregar los huevos (a temperatura ambiente) de a uno y batir bien después de cada adición.Incorporar la harina mezclando con la leche y el vainillín.
Enmantecar y enharinar un molde savarín (de 32 cms) y colocar una parte de la preparación, a la otra parte le agregamos el cacao, mezclamos y lo volcamos en forma irregular para que quede el marmolado.Cocinar en horno precalentado suave durante 35 a 40 minutos.

BUENO , ESPERO QUE LES SALGA MUY  RICA !.....                                      

DESPUÉS PUBLICARE LA FOTO.....